Autor: Mario Ernesto Castillo Guzmán
Desde
el año 2013 los miembros del Consejo de
Vigilancia de la Profesión de la Contaduría Pública y Auditoria (en adelante el
Consejo), han elaborado y subido a su página Web un anteproyecto de reformas a
la Ley Reguladora del Ejercicio de la Contaduría (en adelante LREC), lo cual es
normal ya que toda ley por su propia naturaleza debe ser revisada cada cierto
tiempo, para que su contenido se adapte a las nuevas realidades.
En
el caso específico, la LREC entró en vigencia en abril de 2000, es decir que
actualmente casi tiene 15 años de existir, por lo que es conveniente hacerle una
revisada.
La
actual versión del anteproyecto de las reformas a la LREC tiene cambios de fondo
que afectarán tanto a los contadores públicos que estamos inscritos en el
Consejo, como a los licenciados en contaduría pública que recién se gradúan y
aspiran a ser autorizados para poder ejercer la auditoría externa en forma
independiente.
Este
anteproyecto pretende implementar el requisito que todo contador público solicite
ser inscrito por primera vez en el Consejo debe tener dos años de experiencia
profesional, y luego deberá someterse a un examen de conocimientos. Si no pasa
la prueba, aunque tenga la experiencia no será inscrito ¿Qué opinan?
Para
los que ya estamos inscritos, de aprobarse las reformas tendríamos que pagar
anualmente un derecho para ejercer la profesión, así como cumplir anualmente
las 50 horas de educación continuada, caso contrario no podríamos ejercerla
aunque tengamos la experiencia.
Comprendo
la posición del Consejo, quien busca mejorar la capacidad profesional de los
contadores públicos que ejercemos la auditoría externa, ya que se han dado
casos en que el desarrollo de una auditoria se reflejan serias deficiencias
técnicas y éticas, las cuales en algunos casos han salido a la luz pública en
sonadas estafas, sin embargo me surge la duda ¿Podrían existir otros intereses
subsumidos en estas deficiencias? ¿Se viola con estas disposiciones algún
derecho constitucional? ¿Tendrá el Consejo la competencia para impulsar estos
cambios?
En
nuestra profesión hay excelentes profesionales, sin embargo también hay más de
uno que deja mucho que desear, eso no lo podemos ocultar, sin embargo esos
casos son mínimos.
Los
contadores públicos que estamos inscritos en el Consejo y los que están en el
proceso de inscripción, no debemos ser indiferentes a este anteproyecto, porque
su contenido nos afectaría. Si no participamos en este proceso, luego no se
vale estar lamentándose.
No
se trata de contradecir al Consejo por capricho, sino más bien hacer un
análisis jurídico sobre estos temas que son de fondo y no de forma, y en ello
las gremiales juegan un papel de suma importancia.