PROGRAMA DE CONTROL DE CALIDAD DEL CVPCPA

Autor: Mario Ernesto Castillo Guzmán

El Consejo de Vigilancia de la Profesión de la Contaduría Pública y Auditoria (CVPCPA o Consejo), es la entidad del Estado que se encarga de autorizar y supervisar a los contadores y auditores.

Este Consejo ha implementado desde aproximadamente el año 2006, un programa de CONTROL DE CALIDAD, que consiste en revisiones que personal de esta institución hace a los auditores, con el propósito de verificar que su trabajo lo realicen de acuerdo a las Normas Internacionales de Auditoria (NIA), que son exigentes desde septiembre de 1999.

Las NIA son los parámetros que el auditor debe tomar en cuenta a la hora de realizar una auditoría, siendo extenso su contenido que sobrepasan las 1000 páginas en la última versión de ellas que salió en 2016.

Lo anterior muestra el panorama que para realizar auditorias, se requiere tiempo para leer y dinero para asistir a capacitaciones sobre temas que tengan relación con las NIA.

En la página Web del Consejo aparece un check list o lista, de los aspectos básicos que el personal del Consejo verificará que el auditor lo haya cumplido o tenga la evidencia de ello, en la realización de una auditoría (encargo).

Esta lista es la fuente primaria a la cual deben recurrir las gremiales, para organizar capacitaciones para sus Miembros, para que conozcan lo que el personal del Consejo les va a requerir en caso que sean seleccionados para ser sujetos a una revisión de control de calidad. 

Además del conocimiento teórico sobre los documentos del check list, se les debería proporcionar modelos de ellos, para que a la hora de una revisión de esta naturaleza, salgan evaluados lo mejor posible.

Los servicios que un contador público ofrece son variados, por ejemplo: llevar contabilidades, realizar auditorías externas y fiscales, peritajes contables, asesorías, etc.

Cuando un contador público es sujeto de revisión de control de calidad, le piden sus papeles de trabajo (PT) de las auditorias que realizó en determinado año (externa o fisca); la elaboración de los PT de una auditoria externa son diferentes a los de la auditoría fiscal, muy a pesar que ambas toman de base la misma información, lo cual es entendible ya que tienen finalidades diferentes.

Al referimos a los PT, debemos entender que incluyen: el archivo permanente, el administrativo y corriente; estos archivos se deben hacer por cada cliente, siendo los que más tienen movimiento el administrativo y el corriente.

Recordando un poco la teoría sobre los PT, el archivo permanente lo integran los documentos que sirven de fuente de consulta para más de un año, por ejemplo: escritura de constitución y sus modificaciones. sistema contable, copia de NIT, NRC tarjeta patronal del ISSS, organigrama de la entidad, credencial de la administración, permisos ambientales, manuales, reglamento interno, copia de los estados financieros y dictamen, contratos, poderes, etc.

Con respeto al archivo administrativo, este aglutina todos los documentos relacionados con la administración de la auditoria, es decir que son exclusivamente del año de la auditoria, por ejemplo: evaluación del prospecto (potencial cliente), evaluación para continuar brindando un servicio a un cliente, oferta presentada al cliente debidamente firmada de recibido, carta compromiso, cartas de gerencia con evidencia de recibido por cliente, carta salvaguarda, correspondencia normal, etc.

El archivo corriente son los documentos que se relacionan con la ejecución de la auditoria, incluyendo por regla general: la planeación de la auditoria, evaluación del control interno, las pruebas de cumplimiento y las cedulas de la auditoria que estamos realizando (externa o fiscal).

Los PT del archivo corriente se pueden presentar en formato digital (Excel o programa especializado de auditoria), es decir que no es necesario imprimirlos para que sean revisados.

Otro aspecto que no se debe perder de vista es el Manual de Control de Calidad de la Firma, que es lo primero que le piden los revisores del Consejo; su diseño depende si la Firma es una sociedad o una persona natural.

Los integrantes de la Junta Directiva de la RED DE CONTADORES DE EL SALVADOR pensando en el bienestar de sus Miembros, en el año 2016 contrataron a un profesional para que elaborara un Manual de Control de Calidad para Firmas de auditoria que fueran una sociedad o persona natural. 

Este Manual no se vende a particulares sino solo a Miembros de la gremial, debido a que su precio de venta es inferior a su costo, siendo un beneficio técnico que a la hora de una revisión de parte del personal del Consejo, le va a servir muchísimo. El archivo del Manual es editable y va grabado en un CD, y hasta donde me recuerdo, dan facilidades de pago al Miembro que esté interesado en adquirirlo.

En mi opinión profesional así deben actuar todas las gremiales, es decir ayudando a sus Miembros para que tengan las herramientas técnicas que le permitan cumplir con los requerimientos que pide el Consejo a un contador público que ejerce en forma independiente su profesión. 

La mayoría de las capacitaciones que dan las gremiales sobre los PT, están enfocadas a los de la auditoria externa, siendo pocos los casos en que abordan el diseño de los PT para la auditoria fiscal. Esto es un insumo importante que las gremiales deberían tomar en cuenta para su plan de capacitaciones para sus Miembros.

Considero que las revisiones de control de calidad son buenas, porque permiten realizar una autoevaluación de cómo el contador público está realizando su trabajo como auditor, siendo normal que hayan hallazgos de “x” o “y” naturaleza, ya sea por desconocimiento, olvido o negligencia.

Las exigencias para un auditor a nivel individual, son menores que cuando la Firma es una sociedad, no en la parte técnica la cual es igual en ambos casos, sino en la administrativa, ya que los que trabajan en auditoria en la sociedad, tienen que cumplir con las horas de educación continuada, el manual de control de calidad tiene una serie de requerimientos que no se le pide a un auditor individual, etc.

Antes de decidir tener un Despacho de contabilidad y auditoría, trabajé en empresas que son GRANDES CONTRIBUYENTES y pude percibir como las Firmas de auditoría que tienen representación internacional, cobran honorarios más altos que las que no tienen este convenio.

Lo simpático es que en algunos casos la calidad del servicio de las Firmas con representación, era similar al de otros colegas que no tienen tal convenio, y en más de uno, era mejor el de la Firma que no tenía representación.

Estimo que en nuestro país las auditorias de las empresas, las realizan en un 90% las Firmas que tienen representación internacional, y el 10% restante, las que no tienen esta clase de convenios.

El Consejo pide a todas las Firmas de auditoría (con o sin representación internacional, pequeña, mediana o grande), que apliquen las NIA, sin embargo mi opinión profesional es que ninguna Firma (individual o societaria) las aplica en un 100%, y prueba de ello, son los escándalos en que se han visto involucradas algunas Firmas de auditoria de renombre internacional que son conocidas como las BIG FIVE,

Una Firma pequeña tiene menos recursos para cumplir con el 100% de las NIA, lo cual es una realidad y no un invento, sin embargo se les pide que lo hagan por ser un requerimiento que está establecido en la Ley Reguladora del Ejercicio de la Contaduría.

La situación económica está difícil a nivel mundial, y El Salvador no se escapa de ello, lo que provoca que hayan ofertas de colegas con precios bien bajos, que no se entiende como logran desarrollar sus auditorias apegándose más o menos a lo que exigen las NIA; sin duda alguna muchos colegas no aplican las NIA, ya que si lo hicieran, se darían cuenta que no es fácil y que los costos para aplicarlas someramente son altos.

El reto que tenemos los auditores, es tratar de aplicar las NIA lo más que podamos, sin embargo para ejecutarlas como dicta su base técnica, ineludiblemente los honorarios deberían ser mayores a los que se cobran actualmente, y eso es una dificultad enorme, ya que los clientes perciben al auditor como un gasto, como un mal necesario que tienen que pagar porque la ley se los exige.

Hasta donde tengo conocimiento, ya se superó el número de los 5700 auditores que estamos inscritos en el Consejo para ejercer la auditoria en forma independiente, y cada día ingresan más colegas a este circulo de profesionales, por lo que no nos debe extrañar que para sobrevivir, se agudice la guerra de precios dentro del gremio.

Para poder enfrentar esta realidad, los contadores públicos tenemos que especializarnos para brindar mejores servicios y con ello diferenciarnos de la competencia.

Para que se diferencie un contador público de los demás colegas, sugiero que quien pueda estudiar Ciencias Jurídicas que lo haga, ya que es un complemente importantísimo para nuestra profesión.

Lo digo con propiedad y humildad del caso, ya que soy graduado de la carrera de licenciatura en contaduría pública y me encuentro en el proceso de graduación que espero finalizar en el tercer trimestre de 2019, para obtener el titulo de licenciado en ciencias jurídicas; ambas carreras las he estudiado en la Universidad de El Salvador (UES)

Tener este plus de conocimientos, me ha servido para no ser contratado, solo con base al criterio de precio.